La Vicepresidenta de Asuntos de la Mujer y la Familia, Masoumeh Ebtekar, dio positivo a la prueba de coronavirus, así como el Viceministro de Salud, Iraj Harirchi, y además Mojtaba Zolnur, presidente del comité parlamentario sobre Seguridad Nacional y Política Exterior. Todos ellos, altos cargos del gobierno de Irán, ya fueron puestos en cuarentena.
La Vicepresidenta es muy conocida en el país y el exterior por haber sido la portavoz en inglés de los secuestradores durante la “crisis de los rehenes” desatada en 1979 cuando fue tomada la embajada de los Estados Unidos en Irán. Por su parte, el Viceministro de Salud había dado una conferencia de prensa visiblemente afectado y tosiendo, un día antes que se confirme que tiene el coronavirus.
Además se confirmó el fallecimiento del ex embajador iraní ante el Vaticano, Hadi Khosroshahi, quién se convirtió en una víctima más del coronavirus en el país del Medio Oriente. Hadi fue el primer embajador de Irán ante la Santa Sede en 1981.
La situación en la República islámica se complica luego del brote de la enfermedad ocurrido en la ciudad de Qom, a unos 150 kilómetros de la capital, Teherán. Políticos opositores han declarado que el gobierno oculta información sobre la verdadera cantidad de infectados y fallecidos, mientras que la organización Reporteros Sin Fronteras denunció que varios periodistas independientes fueron reprimidos.
El régimen de Teherán creó una unidad para “combatir la propagación de falsos rumores sobre la epidemia del coronavirus en el país”, según declaró su director, Vahid Majid, cuya unidad de ciberpolicía supervisa todas las noticias que se publican en internet. Hasta ahora 24 personas han sido detenidas por divulgar información falsa y rumores sobre el coronavirus en el país.
