La Unidad Fiscal contra Delitos Ambientales, técnicos del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible del Paraguay (MADES), efectivos de la Armada Nacional y de la Marina Mercante, verificaron por segunda vez el buque varado hace dos años en el puerto Campichuelo en Itapúa.
Los técnicos confirmaron el peligro ecológico que representa el hecho de que la embarcación se vaya hundiendo, conteniendo unos 7.000 litros de aceite vegetal, explicó Javier Cantero, corresponsal de la zona del Grupo JBB.
En la oportunidad se extrajeron muestras de líquidos acuosos y aceitosos del interior de la embarcación para someterlos a análisis, y recomendaron apresurar la extracción de los líquidos.
La fiscal Raquel Bordón solicitó al propietario de la embarcación, un ciudadano de nacionalidad coreana identificado como Kyu You Lee, que de inmediato, haga colocar correctamente mallas de protección. Además, lo emplazó por 48 horas, a que contrate a técnicos medioambientales especializados, para realizar el trabajo de retiro y disposición final de los líquidos, que podrían ser sumamente contaminantes.
La embarcación fue adquirida por el ciudadano oriental por la suma de 250 millones de guaraníes y pretendía destinarla al desarme.
La actual situación, pone al extranjero en serios problemas con la justicia, ya que de verterse los líquidos en aguas del río Paraná, se podría dar un verdadero desastre ecológico, y el hombre quedaría expuesto a un proceso penal.
