En su informe de gestión, el director Nacional de Aduanas, Julio Fernández, señaló que si bien la desaceleración a nivel mundial y especialmente regional afectó las recaudaciones este año, lograron alcanzar un incremento del 5,6% en los últimos 15 meses, lo que representa cerca de US$ 130 millones.
Los rubros que sufrieron un déficit sostenido fueron los de vehículos y combustibles, mientras que la Informática y telecomunicaciones registraron un superávit.
Por otra parte, Fernández destacó que el rendimiento positivo también se debió a los numerosos cambios normativos y de control, que forman parte del proceso de formalización y que posibilitaron reducir significativamente la evasión de impuestos.
Entre esas medidas tomadas, se encuentran las correcciones al régimen de importación de remesas expresas o Courier. Además, del 71,4% de importación de teléfonos procedentes de EE.UU que no estaban registrados en el 2018, se logró bajar al 3,8% en el mismo período de 2019.
A esto se suma el golpe al narcotráfico, piratería y contrabando, que pasó de US$ 7 millones en 2018 a US$ 50 millones en 2019, la implementación de precintos electrónicos y el centro único de monitoreo y la enmienda de un decreto, vigente desde hace 10 años, que permitía el ingreso de vehículos nafteros como Flex, entre otras acciones.
El director de Aduanas mencionó que cuentan con la cooperación técnica y financiera de organismos internacionales como FMI, KOIKA, USAID y el Banco Mundial, para continuar con las acciones de formalización y rendimiento, que apuntan a mejorar las recaudaciones en el 2020.
