[Artículo Patrocinado] En los primeros meses de este año, el precio del oro ha experimentado un repunte significativo, registrando nuevos máximos históricos semana tras semana, hasta superar por primera vez la barrera de los 2.400 dólares por onza. Este ascenso vertiginoso ha sido impulsado por una combinación de factores, entre los que se incluyen las crecientes tensiones geopolíticas, particularmente en Oriente Medio; la creciente adquisición de oro físico por parte de los bancos centrales, liderados por China, en un esfuerzo por reducir su exposición al dólar estadounidense; las expectativas de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) de los Estados Unidos; y las preocupaciones sobre la inflación.
El oro ha subido más de un 15% en los últimos tres meses y se ha erigido como la clase de activo con mejor rendimiento desde principios de 2024. Además, ha ganado un 22% desde que la Reserva Federal empezó a subir los tipos de interés en marzo de 2022, una medida que tradicionalmente ha impactado negativamente en el metal precioso. Citigroup, uno de los principales bancos de Estados Unidos, estima que el oro continuará su tendencia alcista, y alcanzará los 3.000 dólares la onza en los próximos seis a 18 meses, gracias al aumento en la demanda de inversores y a las expectativas de nuevos recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. La opinión de Citigroup se suma a la de otros bancos de Wall Street que han elevado sus previsiones de referencia del precio del oro al escenario alcista.
El precio del oro experimentó un repunte significativo, registrando nuevos máximos históricos semana tras semana. Foto: Gentileza.
Los analistas de Citigroup, dirigidos por Aakash Doshi, jefe de investigación de materias primas del banco en Norteamérica, han mejorado su estimación de los precios medios del oro en 2024 hasta los 2.350 dólares, y han revisado su predicción para 2025 en un 40%, hasta 2.875 dólares. También esperan que la cotización del oro supere periódicamente los 2.500 dólares en la segunda mitad de 2024. Estas expectativas se producen después de que Goldman Sachs, otro de los grandes bancos estadounidenses, elevara su estimación del precio del metal precioso para finales de año a 2.700 dólares, describiendo el mercado del oro como un “mercado alcista inquebrantable”.
El atractivo del oro como refugio seguro
En el dinámico y volátil escenario de las finanzas y las inversiones, donde las fluctuaciones del mercado y las turbulencias económicas pueden sorprender en cualquier momento, el oro se erige como un faro de estabilidad en medio de la tormenta. En momentos de incertidumbre económica, volatilidad en los mercados o agitaciones geopolíticas, los inversores recurren al oro, una estrategia que también se puede reflejar en algunas divisas en el ámbito del forex trading, aunque hay que tener en cuenta que el trading de CFD de forex apalancado es altamente especulativo y presenta riesgos altos.
El oro no solo es un activo, es un símbolo de seguridad financiera y resiliencia. Su atractivo radica en su naturaleza tangible, en su capacidad para resistir las fluctuaciones del mercado y en mantener su valor a lo largo del tiempo. Además, las características únicas del oro lo convierten en un activo para diversificar las carteras de inversión.
En el contexto actual, los alcistas mantienen un firme control sobre el precio del oro. La compleja mezcla de tensiones geopolíticas, expectativas de relajación de la política monetaria y compras de los bancos centrales está avivando la demanda de oro como refugio. Además, los alcistas están adoptando un enfoque estratégico a largo plazo, apostando a que la Reserva Federal recortará los tipos de interés para evitar acontecimientos adversos en un año electoral. Con el índice de precios al consumidor (IPC) estadounidense situándose muy por encima del objetivo de estabilidad de precios del 2%, una rebaja de tipos podría desencadenar una nueva oleada inflacionista que, en última instancia, incrementaría la demanda del metal precioso al ayudar a reducir su impacto en la economía.
Los riesgos bajistas en el precio del oro
Sin embargo, a pesar de estas perspectivas alcistas, no se puede ignorar el aumento de riesgos bajistas que podrían afectar al precio del oro en el futuro cercano. Bob Parker, asesor principal de la Asociación Internacional de Mercados de Capitales (ICMA, por sus siglas en inglés), se ha mostrado especialmente contundente respecto a la vulnerabilidad del precio del oro en una entrevista para el programa ‘Squawk Box Europe’ de la CNBC. Según Parker, la fortaleza del dólar estadounidense, el aumento de la rentabilidad de los bonos, las dudas que se ciernen sobre los planes de recorte de tipos de la Reserva Federal y una inflación razonablemente baja son algunos factores que pueden reducir significativamente el atractivo del oro, provocando una venta masiva.
Aunque las perspectivas a corto plazo parecen favorables para el oro, los inversores deben permanecer atentos a los riesgos bajistas que podrían surgir en un entorno de mercados tensionados. La evolución de las políticas, la geopolítica y la economía global seguirán siendo factores fundamentales para determinar la trayectoria futura del precio del oro.
