Este miércoles, Donald Trump se proclamó ganador de las elecciones presidenciales en Estados Unidos tras superar los 270 votos electorales necesarios para hacerse con la presidencia.
Poco antes de la proclamación, el candidato republicano, de 78 años, había reivindicado una “magnífica” victoria sobre la vicepresidenta Kamala Harris, pronunciando un discurso triunfal desde su sede de campaña en Florida, donde prometió “volver a hacer grande a Estados Unidos”.
Para conseguir su contundente victoria, y superar los 270 votos electores necesarios, Trump ganó, como era de esperarse, en Georgia, Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan y Wisconsin, estados considerados claves para alcanzar la mayoría de los sufragios.
“Es una victoria política que nuestro país nunca ha visto antes, nada como esto. Este será el día en que el pueblo americano retome el poder de su país. Tenemos un país que necesita curarse”, expresó.
“Haremos a Estados Unidos grandioso nuevamente, va a ser la época dorada de nuestro país. El éxito nos va a unir y vamos a empezar poniendo a nuestro país en primer lugar”, agregó en mangante neoyorquino.
De esta manera, Trump, que ha sobrevivido a dos intentos de asesinatos, una condena penal y cuatro inculpaciones, se convierte en el 47° presidente de los Estados Unidos y regresará a la Casa Blanca en enero del 2025.