La invasión rusa a Ucrania ha provocado la mayor afluencia de refugiados en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Un máximo de 3,5 millones de personas están en camino a varios países desde el 24 de febrero.
Por su parte, la Unión Europea ha calculado que el número debería ascender a 6,5 millones.
Polonia es el país en el que más refugiados ucranianos han sido rescatados desde el inicio de la guerra (2,1 millones de un total de 3,5 millones).
Los refugiados ucranianos obtienen un número de identificación nacional como Pesel, y pueden trabajar y acceder a los servicios sanitarios y educativos. Decenas de kilómetros de diecinueve ucranios y hay matriculados en las escuelas del país.
En Italia se concentra la segunda comunidad más grande de inmigrantes ucranianos expatriados de la Unión Europea, con 236.000 inmigrantes. La semana pasada se aprobó un decreto para crear 75.000 nuevas plazas en la red nacional de centros habitacionales para seguir recibiendo personas.
Aunque Francia tiene una comunidad ucraniana menor que países como España —18.000 permisos de residencia concedidos—, la avalancha de ucranianos que se precipitan ofensivamente en ese país. Francia está disponible para cubrir hasta 100.000 refugiados ucranianos.
España es uno de los primeros países en adoptar la Directiva de Protección Temporal para refugiados en Ucrania. Es también uno de los pocos que se ha interpretado con más generosidad.
El plan en España se sustenta en dos pilares: la adquisición de documentación, en un procedimiento exclusivo de apertura 24 horas, y el aumento del número de huéspedes con más de 21.000 plazas.
Fuente: El País.