Edith Ortiz, fundadora de la Asociación de Protección Animal Pako Rescate Paraguay, contó lo sucedió el día lunes frente a la clínica veterinaria de la Dirección Nacional de Defensa, Salud y Bienestar Animal. “Ingresé a la casa para preguntar qué estaba sucediendo, pero fui increpada por una persona que me dijo que lo que hacía era invasión a la propiedad privada”, mencionó.
Igualmente, siguió relatando que “cuando le explico que soy presidenta de una asociación protectora de animales y quiero saber qué está pasando, comienzo a ver animales en jaulas tan pequeñas, ni siquiera podían pararse y eso ya me afectó”.
Edith mencionó que, de manera a defenderse de los funcionaros, comenzó a transmitir en vivo a través de su cuenta de Facebook. “Le explico a las personas que como ciudadana tenía todo el derecho de ingresar a un domicilio que era alquilada para una institución pública”, indicó.
La defensora contó que fue hasta la parte trasera del recinto y se dio cuenta de varias irregularidades. “Había agua servida, verde, con larvas. Mi voz se quebró al estar presenciando que había trato cruel dentro de la Dirección de Bienestar Animal. Encontré perros encerrados en piezas”, agregó.
“Le pregunté a la directora dónde se están yendo los animales, pero me ignoró y le ordenó a la Policía que cierren las puertas y nos saquen a todas”, lamentó.
A raíz de lo acontecido, las activistas defensoras de los Derechos de los Animales exigen la renuncia de la directora Teresita de Jesús Álvarez, quien, según manifestaron las protectoras, viene ignorando las denuncias por maltrato y crueldad.
Luego de lo acontecido, Edith realizó la denuncia ante el Ministerio Público, que durante la tarde del lunes allanó la Dirección, pero cuando eso, los animales ya no se encontraban en el sitio.
