La madre de Carlos José María Garcete Dalerio (32), insiste en que la muerte de su hijo sucedida el 25 de diciembre del año 2018 en la Comisaría 4ta. Metropolitana, fue un asesinato y no un suicidio, como fue caratulado por la Fiscalía.

La mujer sostiene que su hijo fue muerto a golpes en el interior del calabozo. Explicó que ese día, los policías llevaron al joven por una supuesta denuncia de violencia familiar. Según la madre, esa acusación nunca fue presentada en contra de su hijo ante la Comisaría.
De acuerdo a la versió de los agentes policiales, Garcete se autoeliminó utilizando el cordón de sus zapatos, atando a una de las rejas del calabozo donde se encontraba. Sin embargo, la madre menciona otras lesiones en el cuello y en la cara, que indicarían que el joven fue agredido.
El informe forense expresa que la muerte se dio por asfixia mecánica.