Un Tribunal de Sentencia condenó a cuatro años de pena privativa de libertad a una mujer de 32 años que no denunció el abuso sexual a su hija de 6 años.

Condenan a madre que no denunció abuso sexual de su hija. Foto: Ilustrativa
La mujer fue encontrada culpable de violación del deber del cuidado y frustración de la persecución y ejecución penal.
De acuerdo al informe fiscal, el abuso fue cometido por el padrastro de la niña, quien además la contagió con sífilis (VDRL).
Actualmente, el hombre se encuentra prófugo y fue declarado en rebeldía por la Justicia. De ser capturado, enfrentará varios años de pena carcelaria.
Madre protegió a su pareja y no a su hija
Durante el juicio, la agente fiscal Julia González Medina presentó numerosas pruebas que demostraron que la madre misma violó gravemente su deber legal de cuidar a su hija.
A pesar de tener conocimiento de las lesiones graves (úlceras e inflamación) y el dolor intenso que sufría la niña en su zona íntima, la madre no permitió que recibiera la atención médica adecuada.
Durante el proceso también se comprobó que la mujer intentó en todo momento proteger a su pareja, huyendo de los hospitales para impedir que fuera sometido a una sanción penal.
La pequeña fue llevada primeramente al Hospital Regional de Ciudad del Este, donde una pediatra la inspeccionó e informó a la madre de la sospecha de abuso sexual, sugiriendo la activación del protocolo interinstitucional; sin embargo, la acusada huyó del hospital con la víctima, impidiendo el procedimiento y el tratamiento médico.
Tiempo después, cuando el estado de la menor empeoró, la madre acudió a otro centro asistencial de la Universidad Central del Paraguay. Allí, la médica de turno también confirmó la sospecha de abuso y las lesiones.
Al informarle a la madre que daría aviso a las autoridades, la misma intentó huir una vez más. Sin embargo, fue retenida en las afueras del nosocomio y entregada a las autoridades.
El informe socioambiental y el dictamen victimológico confirmaron el total descuido y los daños psicológicos sufridos por la niña.
Cabe recordar que el nombre de la imputada se omite para proteger la identidad de los niños, en cumplimiento a lo establecido en el Art. 29 del Código de la Niñez y Adolescencia, que prohíbe la publicación de datos que posibiliten identificar a menores que son víctimas o supuestos autores de hechos punibles.