Luego de haber trasladado los cuerpos de las mujeres abatidas durante un enfrentamiento entre la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y miembros del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), en el norte del país, se dio a conocer la pericia forense realizada, en la que se definieron las edades estimadas, confirmando que se trataba de dos menores de aproximadamente 15 y 18 años.

Posteriormente, el general Héctor Grau, comandante de la FTC, indicó que la identificación de las mismas mediante el sistema de la Policía Nacional no fue posible, por lo que presumían que podrían ser parientes de Liliana y Osvaldo Villalba, también miembros referentes del EPP.
Sin embargo, Genoveva Oviedo Brítez confirmó que se trataba de sus sobrinas, quienes tenían 11 y 12 años, y exigió que los cuerpos sean entregados a la familia para “dispensarles el funeral que merecen”, según expresó en su publicación.
Cristian Ferreira, médico forense de la Fiscalía de Horqueta, dio detalles del análisis practicado a los cuerpos de las dos menores y explicó que, presumiblemente, fueron abatidas cuando corrían para escapar, con base en los lugares en los que los cuerpos presentaban las heridas de bala.
Según detalló el Dr. Ferreira, las menores portaban armas de fuego, municiones, una agenda y otros objetos personales, que fueron entregados al Ministerio Público.
En conferencia de prensa desarrollada en la tarde de ayer, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, quien se trasladó hasta el norte del país, se dirigió a los miembros del EPP, pidiendo que se entreguen de forma pacífica y enfrenten sus cargos en la justicia.

