El pasado 1 de agosto nació el tercer tapir o mborevi (tapirus terrestris) bajo el sistema de reproducción en cautiverio en el Refugio Faunístico Atinguy, de la Entidad Binacional Yacyretá (Eby).
Desde la institución detallaron que del cruce de “Rosita” y “Nachito”, nombres con los que fueron bautizados en el refugio, nació una hembra con 5,5 kilogramos.
El tapir bebé tiene como característica principal las listas blancas que normalmente desaparecen entre los 4 a 6 meses, puntualizaron.
Desde la Eby resaltaron que el mborevi es una especie de gran tamaño, llegando a alcanzar incluso los 300 kilos de peso y es considerado como el “jardinero de los bosques”, ya que por su alimentación a base de frutas, hojas y vainas, traslada semillas de un lugar a otro, ayudando a la dispersión de las plantas en su hábitat.
“La cría en cautiverio es considerada una herramienta para volver a repoblar de ejemplares de la fauna autóctona, la zona de reservas protegidas”, enfatizaron.
Sobre el refugio:
Atinguy trabaja con un Programa Especial de Reproducción, que abarca cuatro especies en peligro de extinción: guasu puku o ciervo de los pantanos; el aguara guasu; el yacaré overo y el mytu o pavo del monte.
Fueron logradas reproducciones exitosas de estas especies y de otras como la del Yaguareté o Panthera Onca, incorporándose en los últimos años 4 nuevos ejemplares con crías de los Yaguareté “Chiqui” y “Xena”.
También se logró entre el 2021 y 2022, el nacimiento y la viabilidad de 5 crías de puma concolor, conocido como puma o Jagua pytã y este año el nacimiento de la especie tapirus terrestris, tapir o mborevi.