La familia del niño de 12 años que perdió la vida a consecuencia de la picadura de un alacrán tomó la valiente decisión de donar los órganos del menor, ofreciendo una esperanza a cuatro personas en lista de espera para trasplantes.
Desde el Ministerio de Salud detallaron que el Instituto Nacional de Ablación y Trasplante lideró el procedimiento de ablación de órganos, bajo la dirección del Dr. Hugo Espinoza, junto a un equipo de profesionales del IPS.
De acuerdo a lo informado, dos pacientes, de 17 y 35 años respectivamente, recibirán los riñones. En tanto, las córneas se preservarán y serán implantadas a pacientes para mejorar su calidad de vida.
El Dr. Espinoza elogió el coraje y la generosidad de los padres en este momento tan doloroso, afirmando que “este gesto de amor trasciende palabras y ejemplifica el impacto positivo que la donación de órganos puede tener en la vida de quienes esperan ansiosamente una segunda oportunidad”.
Desde el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu puntualizaron que el corazón del menor no podrá ser implantado en otra persona, ya que se constató que sufría de miocarditis.
Cabe recordar que la muerte del niño se confirmó el día de ayer, en horas de la noche, en el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, luego de varios días en terapia intensiva.
Donación de órganos
La cartera sanitaria resaltó que Paraguay cuenta con un equipo técnico-humano altamente capacitado y hospitales de primera calidad para llevar a cabo procedimientos de trasplante de órganos.
No obstante, el éxito de estos trasplantes depende en gran medida de la voluntad de la sociedad de convertirse en donante de órganos y tejidos.
Según la Ley Nº 6170/18, toda persona mayor de 18 años se considera donante de órganos automáticamente después de su fallecimiento, a menos que haya manifestado su decisión contraria por escrito al Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT).
Esta ley busca promover la donación de órganos y aumentar las posibilidades de salvar vidas a través de trasplantes.