El septuagenario fue hallado culpable del hecho punible y fue condenado a 23 años y 3 meses de pena privativa de libertad por haber abusado sexualmente de una niña de 9 años, quien fue vulnerada en reiteradas ocasiones.
De acuerdo a los datos, el hombre permanece bajo arresto domiciliario debido a la edad, a pesar de la revocación realizada por la representación fiscal, que logró comprobar la responsabilidad del mismo en la referida causa, a través de los medios probatorios expuestos ante el Tribunal Colegiado de Caazapá.
Los antecedentes del caso refieren que las vulneraciones se produjeron en el 2019 cuando el victimario asistía a un templo como feligrés, quien tenía afinidad con la familia de la víctima, siendo contratado para realizar trabajos en la vivienda de los mismos y en la citada congregación.
El hombre se aprovechó de la confianza que tenían hacia su persona para perpetrar el hecho, tanto en la feligresía como en su domicilio, donde llevó a la víctima, tras convencer a los padres; alegando que la llevaría a jugar a la casa de su nieta.
Aunque la niña intentaba defenderse del agresor no pudo resistir la fuerza del hombre y las amenazas para guardar silencio. Cabe señalar que el sentenciado también se encuentra procesado por otro hecho similar del que resultaron víctimas sus nietas.